Es algo extraño venderse, porque normalmente lo tomamos de manera sexual, y es evidente que aquí no lo estoy haciendo así. Sólo busco el mejor postor que a cambio de la más grata compañía, le ofrezco lo que a continuación describiré, pero primero nombraré las contra indicaciones que conmigo se lleva.
1. Si, definitivamente soy escandalosa, soy algo ridícula, y bastante temperamental. Tengo ciertas manías inexplicables y extrañas, no puedo sentir la crema en mi piel, detesto sentirme sudada o untada, no me cojo de los buses o evito hacerlo hasta el último momento. Me deprimen los días grises. Puedo tener muchos cambios de humor en el día. Basta una canción movida para subirme el ánimo. Converso constantemente conmigo misma y me río de mi. Me gustan las historias con final feliz a pesar de ser pesimista y saber que la vida es lo más triste que pueda existir y los finales felices nunca existen. Soy sobreviviente del amor, me han roto tantas veces, que lo último que deseo es un engaño. No acepto las mentiras, pero soy humana y he mentido, así que intento ser comprensiva. En algunos momentos de desesperación soy inescrupulosa. Como mujer mortal soy egoísta, especialmente por ser cuasi hija única. Soy franca, sincera, cruel, sarcástica, ilógica, aprovechada, gritona, fastidiosa. Me río de las personas, y me parece magnifica la manera en que funciona la vida, el karma y sus ironías. Soy sensible y no soporto la frialdad a pesar de intentar ser distante. Soy especialista en sacarle el mal genio a las personas, hasta que no lo logro no quedo feliz y no me calmo. Canto en voz alta cuando camino y no es raro verme simulando bailar cuando voy escuchando música. A veces amanezco con la simple necesidad de pelear, llamada malparidez existencial. Estoy fascinada de una extraña manera con la luna. Creo en la reencarnación, en el horóscopo, en el tarot, en los ángeles y en Dios. No sé cocinar, no entiendo de fútbol, y soy celosa desde un límite.Complicada pero práctica, no me quiere me voy, no me habla me voy, extremista hasta el fin de mis días.